Jueces de Garantía en Santiago
En solemne ceremonia encabezada por el Presidente de la Corte Suprema de Justicia Marcos Libedinsky Tschorne, juraron esta tarde 32 magistrados que asumirán en los 12 Juzgados de Garantía dependientes de la Corte de Apelaciones de Santiago, creados en el marco de la próxima puesta en marcha de la Reforma Procesal Penal en la Región Metropolitana.
El acto contó con la presencia del Ministro de Justicia Luis Bates, el Fiscal Nacional Guillermo Piedrabuena, el Defensor Nacional Rodrigo Quintana, otras autoridades del sector justicia y casi la totalidad de los ministros del tribunal de alzada capitalino.
Tomó juramento a los nuevos jueces el Presidente de la Corte de Apelaciones de Santiago, Ministro Juan González Zúñiga.
A continuación transcribimos palabras que dirigió a los Jueces de Garantía, luego de su juramento, el Presidente de la Corte Suprema.
Señoras y Señores:
Este acto de juramento de 32 Jueces de Garantía de Santiago, celebrado con solemnidades que no son habituales en nuestro medio judicial, pretende enviar un mensaje a la ciudadanía. En breve ustedes, nuevos jueces, jugarán un importante rol en la justicia procesal penal que se ejercerá en la Región Metropolitana -sin duda alguna la más conflictiva del país- y se convertirán en los protagonistas de una página difícil en nuestra historia judicial.
Estamos ciertos que lo harán poniendo todo su empeño y dando lo mejor de cada uno, y que asimismo, tendrán como meta la superación continua de su papel. Nuestro país está pendiente de los resultados de la implantación del nuevo sistema Procesal Penal y debe tener fe que se ha hecho todo lo posible para prepararnos de la mejor manera para llevarlo adelante.
Se ha tropezado con muchas dificultades, pero también ha existido un espíritu muy positivo para superarlas y una colaboración altamente eficaz de todos los poderes públicos y diversas entidades públicas y privadas, para poder implantar este nuevo sistema en el que tantas esperanzas se han depositado.
Hace sólo tres horas antes, en esta misma Sala, le decía a jóvenes que recién habían recibido sus títulos de abogados, “que la justicia no sólo debe realizarse, sino que también debe ser vista como realizada. Sabemos mejor que nadie que la falta de credibilidad de la gente en el sistema de justicia, debilita la confianza en el régimen democrático y que cuando esto sucede sostenidamente es señal que ha llegado el momento de afrontar la solución de todo lo que provoque el descreimiento social en la Justicia.”
Señalaba, asimismo, que estamos plenamente convencidos de que se requiere de cambios trascendentales, con el fin de agilizar la administración de justicia y que realizar cambios profundos no es fácil, con frecuencia encontramos resistencia, a veces por falta de voluntad, por desconocimiento o simplemente por temor al cambio. Debemos construir una base sólida en la que el sistema de justicia funcione con independencia, profesionalismo, imparcialidad, espíritu de servicio, rectitud, sobriedad, acuciosidad y respeto a la institucionalidad. Estos son los valores a vivir, mostrar y destacar por el Poder Judicial. Estos son los valores con los que Uds. deberán encarar el ejercicio de las funciones que les corresponderá desempeñar en los cargos para los cuales habéis sido designados.
Para concluir, debo recordarles que una de las creencias más perniciosas al mejoramiento concreto del servicio de justicia, consiste en fomentar las expectativas que todo cambia al día siguiente de entrar en vigencia un Código nuevo. La realidad es que los cambios beneficiosos, por supuesto, que puedan producirse con el nuevo sistema procesal penal, que Uds. deberán poner en práctica, sólo en parte, se deberán al nuevo Código, pero en lo sustancial, en lo más importante, dependerán de la interpretación y aplicación que Uds. realicen de la nueva normativa.
Nuestro país espera muchísimo de Uds., pero sabemos que se han preparado y continuarán haciéndolo de la mejor manera posible y que van a asumir sus funciones en la plena convicción de que los Jueces deben ser, no sólo los funcionarios más confiables de un país, sino además, la esperanza de que el valor Justicia pueda lograrse satisfactoriamente en la tierra.
Por último, les deseo que desempeñen sus funciones en una forma tal que nos haga seguir sintiéndonos orgullosos de los jueces que forman nuestro Poder Judicial.
Muchas gracias