Reconocer a la artesanía como una manifestación artística cultural que aporta al desarrollo nacional y contribuye a la puesta en valor del arte y sus cultores. Esa es la finalidad del proyecto (boletín 16371) aprobado hoy por la Sala de la Cámara, en tercer trámite, y enviado a fase de promulgación.
Por su paso por el Senado, el texto fue objeto de variados cambios, tanto formales como de fondo. Entre ellos, se definió que esta ley tiene como finalidad “el reconocimiento de la artesanía, sus prácticas y cultores, como disciplina artística cultural, que tiene un impacto en el desarrollo integral del país a través del fortalecimiento de las identidades y tradiciones territoriales”.
Se mantuvo el texto de la Cámara en lo referente a que esta ley busca dar puesta en valor a la artesanía y sus cultores/as. También el fomento de la creación y otras acciones vinculadas a esta actividad, así como propiciar la protección de la labor y sus materias primas, y la perduración de la obra y legado de las y los artesanos.
Tampoco fue objeto de enmiendas los deberes del Estado en este ámbito. En este marco se plantea:
- Proteger, salvaguardar y fomentar el desarrollo de la artesanía, en tanto práctica artística cultural.
- Reconocer a las artesanas y artesanos como creadores y cultores fundamentales para el acervo cultural del país.
- Adoptar las medidas que faciliten la labor de las y los artesanos para consolidar el sentido de pertenencia e identidad expresado en la artesanía.
El Senado introdujo un artículo nuevo para encargar a las y los inspectores municipales y Carabineros velar por el cumplimiento de esta ley. Asimismo, se ordena a quienes participen de ferias de artesanías a facilitar la fiscalización y tener su documentación al día.
Institucionalidad en apoyo a la artesanía

La nueva ley también contempla la creación de la Política Nacional de Artesanía. Esta será un instrumento de planificación que señalará los objetivos para lograr el desarrollo de la actividad. Se desarrollará en un marco de cinco años. De igual modo, se contempla la ejecución de un Plan Nacional de Artesanía, que operativizará las líneas dispuestas por la política nacional.
Paralelamente, se crea el Consejo Nacional de Artesanía, dependiente del Ministerio de las Culturas, y el Registro Nacional de Artesanía. Según se definió, éste será de carácter público y gratuito y se le conocerá también como “ChileArtesanía”. Se constituirá como un apartado nacional de artesanas, artesanos y personas jurídicas relacionadas con la artesanía.
La ley, de igual modo, contempla la creación de un Comité Interinstitucional de Artesanía, acotando sus integrantes y funciones. También se prevé la constitución de una articulación territorial, a través de mesas regionales de artesanía. En este contexto, se especifican las tareas a seguir, procedimientos y composición.
Además, se crea el “Sello de Excelencia a la Artesanía”. Será entregado por el Ministerio de las Culturas. Distinguirá las obras o piezas de artesanía que destacan por su autenticidad, innovación y sustentabilidad. El premio busca ampliar el desarrollo de la actividad, incentivar la creatividad, fomentar la comercialización, promover sus obras y a sus autores/as.
Finalmente, entre otras materias, en el segundo trámite se incorporó el Fondo Nacional de Fomento y Desarrollo de la Artesanía. Se destinará al financiamiento parcial o total de programas, proyectos, iniciativas, medidas o acciones de fomento, desarrollo, conservación y salvaguardia de la artesanía del país.
Discusión de la Sala

Participaron en el debate Carmen Hertz, Luis Malla, Clara Sagardia, Carla Morales, Daniella Cicardini, Felipe Camaño, Nathalie Castillo, Marta Bravo, Jorge Guzmán, Marta González, Camila Musante, Sara Concha, Viviana Delgado, Juan Carlos Beltrán, Cristián Tapia, Leonardo Soto, Fernando Bórquez, Jaime Naranjo, Joanna Pérez, Alejandro Bernales, Daniel Lilayu y Marcos Ilabaca.
En general, las intervenciones fueron en apoyo a esta actividad. Se relevó que se le de estatus legal a su reconocimiento. Igualmente, se destacó la creación de una institucionalidad para su apoyo, la definición de una política y plan ad hoc y la entrega de un fondo nacional radicado en este ámbito.
Asimismo, la mayoría aprovechó la ocasión para reconocer el trabajo de artesanos y artesanas de sus respectivos distritos, algunos presentes en las tribunas.
La ministra de las Culturas, Carolina Arredondo, agradeció el apoyo de la Sala y resaltó la importancia de este proyecto. Según remarcó, cuando se habla de artesanía, se habla de Chile, de lo que nos identifica y representa, tanto a nivel nacional como hacia el extranjero.
Las modificaciones se respaldaron en dos votaciones. Por medio de las primeras, se aprobaron, por 120 votos a favor, 9 en contra y 4 abstenciones, las normas generales. A través de la segunda, se apoyaron, por 96 votos a favor, 13 en contra y 24 abstenciones, las disposiciones de ley orgánica constitucional. Con ello, la propuesta quedó en posibilidad de pasar a fase de promulgación.