Las y los diputados de la Comisión de Obras Públicas despacharon a Sala el proyecto que fortalece la fiscalización al transporte ilegal de turistas y pasajeros (boletín 17.553).
En general, el texto propone sancionar la operación de vehículos no habilitados para prestar servicios de transporte remunerado de pasajeros y turismo. Actualmente, las medidas restrictivas sólo se refieren a vehículos de locomoción colectiva.
Es decir, dejan fuera de la esfera de la fiscalización y sanción del transporte ilegal a los vehículos individuales como taxis básicos, ejecutivos y de turismo; o, incluso, vehículos privados que son utilizados para el transporte informal.
Este inconveniente queda en evidencia, por ejemplo, en el aeropuerto de Santiago, donde con frecuencia los turistas son estafados por “taxistas ilegales”. Lamentablemente, las sanciones son muy bajas, en especial tratándose de vehículos no inscritos como transporte público.
Un problema que, a juicio del presidente de la instancia, Carlos Bianchi, es preciso legislar. Con matices, el diputado Jaime Sáez señaló que “no todo puede ser susceptible de normas por medio de una ley”. Añadió, que “aquí también hay una responsabilidad de un concesionario”. Para el diputado Leonidas Romero, en tanto, es clave “tomar acciones de un problema que se arrastra hace años y es independiente del gobierno de turno”.
Taxis piratas y sanciones

A la sesión concurrió Ricardo Valdés, presidente del Sindicato N°1 de Trabajadores Independientes de Taxis de Turismo Aeropuerto “Arturo Merino Benítez”. El dirigente sostuvo que los “taxistas” (ilegales) abordan a los turistas o pasajeros a la salida del terminal. Pero, denunció que, aunque los detienen o infraccionan, al día siguiente operan nuevamente sin problemas.
Por su parte, el subsecretario de Transportes, Jorge Daza, señaló que en el caso específico del citado aeropuerto hay una serie de problemas. Y, agregó, que aunque el texto no es una solución total, “se hace cargo de algunos de esos inconvenientes”.
Aquello a partir de crear “un régimen de sanciones para conductas ilegales que no están consideradas hoy y esto es un avance, independiente de las mejorías que se le pueden hacer al texto en el trámite legislativo”, puntualizó.
El informe del proyecto aprobado lo entregará a la Sala la diputada Emilia Nuyado.
Transportes y elementos de seguridad

En otra materia, la comisión también prosiguió con la revisión del proyecto, de mociones refundidas, que modifica la Ley de Tránsito.
En este caso, la iniciativa propone exigir a los vehículos de transporte de pasajeros y de carga contar con elementos de seguridad y sistemas de monitoreo (boletines 17.427, 17.430 y 17.452).
Entre las medidas que proponen las tres mociones están:
- Luz o baliza de posicionamiento de emergencia
- Conos de señalización vial retroreflectantes
- Sistema de monitoreo, detección y mitigación de eventos de somnolencia, fatiga y distracción en los procesos de conducción.
- Radio comunicadores en cabinas
- Chalecos reflectantes para cada pasajero
Desde la Asociación de Buses Interprovinciales, Internacionales e Industriales, ABI A.G., su presidenta, Carolina Navarrete, manifestó que toda acción que busque brindar seguridad es positiva.
No obstante, planteó que es “importante que haya una priorización de lo que es mejor, en función de los impactos, y que estos también sean económicamente viables para la industria”.
Igualmente, Marcos Carter, presidente de la Federación Gremial Nacional de Transporte Rural, Interurbano, Interregional e Internacional, dijo que los esfuerzos en la materia siempre son positivos. Pero, también planteó que los problemas de seguridad en el transporte son múltiples y no solo los que están contemplados en el proyecto. “Hay temas de iluminación de vías, estado de caminos y rutas”, entre otros.
Finalmente, en el marco de esta primera etapa de discusión legislativa, el subsecretario de Transportes solicitó un plazo de dos semanas para presentar a la comisión una indicación sustitutiva que vaya en la línea y espíritu del texto original.