Asociación Nacional de Magistrados
En la ciudad de Punta Arenas se efectuó la Trigésimo Segunda Convención Anual de la Asociación Nacional de Magistrados de Chile, en la que participaron 130 jueces procedentes de todas las regiones del país.
La ceremonia inaugural del encuentro contó con la presencia del Presidente de la Corte Suprema Marcos Libedinsky, los ministros del máximo tribunal Urbano Marín y Jorge Medina, y el Subsecretario de Justicia, Jaime Arellano.
Transcribimos a continuación, discurso del Presidente de la Corte Suprema en el acto de apertura de la Convención de Magistrados.
Señoras y Señores:
Estimo que esta Convención Ordinaria de la Asociación Nacional de Magistrados es una magnífica oportunidad para poner al tanto a los compañeros Magistrados, Jueces y funcionarios en general de las preocupaciones que han existido al interior de la Corte Suprema sobre los problemas que enfrentamos en el ámbito de la judicatura, esto a fin de que puedan considerarlos en sus deliberaciones en diálogos francos y sinceros que, en lo posible, aporten propuestas de soluciones serias y realistas a dichos problemas, que puedan sumarse a las ya tomadas por la Corte.
Como es sabido, en el mes de octubre pasado, la Corte Suprema celebró unas jornadas con el fin de reflexionar sobre la modernización interna del Poder Judicial, jornadas en las que se llegó a las conclusiones que, a continuación, en forma detallada les daré a conocer:
1) Efectuar una planificación estratégica diferenciada de mediano plazo, que permita un cabal cumplimiento de la misión del Poder Judicial, distinguiendo para ello las funciones jurisdiccionales propiamente tales, de las de gobierno y administración, lo cual presupone una visión común y predeterminada de la Institución.
2) Estudiar, en el ámbito estructural, el posible perfeccionamiento del escalafón judicial, distinguiendo entre los funcionarios que realizan actividades jurisdiccionales, de aquellos que realizan labores de apoyo a dicha función.
3) Revisar la situación actual de diversos cometidos de apoyo a la función jurisdiccional, en especial la labor futura de los fiscales judiciales, que debe ser definida a la brevedad. Del mismo modo, a objeto de mejorar el servicio a la comunidad, se plantea la necesidad de analizar las relaciones con los colaboradores externos de la administración de justicia, tales como Gendarmería, peritos judiciales, policías, Servicio Médico Legal, etc.
4) Identificar y distinguir las labores de los organismos auxiliares de la gestión de gobierno y de la administración judicial, a fin de propender a una mayor coordinación entre ellos y con los tribunales en sus diversos niveles, así como la ampliación de sus funciones y estructuras, priorizando la utilización de los sistemas informáticos y otras técnicas de gestión.
5) Analizar, en el área de los recursos humanos, y en forma más pormenorizada, la asignación de labores para los distintos niveles de funcionarios y empleados, con un mayor grado de autonomía, iniciativa y flexibilidad para modificar plantas y descripciones de cargos, de acuerdo a las realidades de cada unidad de trabajo.
6) Definir convenientemente el nivel de exigencias para el reclutamiento y selección de los diversos cargos, y desarrollar programas de capacitación a través de la Corporación Administrativa del Poder Judicial, en aquellas áreas no cubiertas por la Academia Judicial.
7) Promover, en las relaciones institucionales, acciones conjuntas con entidades estatales, académicas y privadas, tendientes a reforzar la apertura del Poder Judicial hacia la comunidad.
8) Desarrollar acciones, tanto internas como externas, que permitan mejorar la percepción ciudadana acerca de la administración de justicia.
En relación con este último punto, la Corporación Administrativa del Poder Judicial se impuso la tarea de precisar y posicionar la imagen corporativa del Poder Judicial, para lo cual se llamó a licitación con el fin de contratar una entidad externa que pueda efectuar un estudio en la materia y proporcione el apoyo que requiere el desarrollo de actividades conducentes a perfeccionar y mejorar aquella imagen corporativa.
En definitiva, para el logro del anterior objetivo se suscribió un contrato con Extend Comunicaciones S.A. en virtud del cual, esta firma se obligó a efectuar un estudio en el que, entre otros aspectos, se formulará un diagnóstico de cómo es percibido el Poder Judicial por los diversos sectores de la población que son usuarios y afectados por la acción de los tribunales, a precisar y definir cuál es la verdadera imagen corporativa que aquellos tienen del Poder Judicial, y a definir y proponer medidas y actividades concretas para perfeccionar y mejorar dicha imagen en el marco de planes y líneas de acción a corto y mediano plazo.
Paralelamente a lo anterior, también se generó en el Ministerio de Justicia la denominada “Mesa Judicial”, conformada por Ministros de la Corte Suprema, académicos y Sres. Ministro y Subsecretario de Justicia con la finalidad de generar ideas, acuerdos y recomendaciones destinados a concretarse en proyectos de ley tendientes todos a modernizar la función judicial. A dicho efecto, se organizaron cuatro subcomisiones en las que se debatieron, en una primera aproximación, los siguientes temas:
a) Procedimiento disciplinario y recurso de queja;
b) Autonomía Financiera;
c) Abogados integrantes y Fiscales Judiciales
d) Modificaciones al régimen de nombramientos y calificaciones.
Con posterioridad los temas se estudiaron y discutieron en reuniones plenarias y, actualmente, se encuentran en trámite de redacción de anteproyectos de ley, salvo el de Autonomía Financiera que está redactado, pero cuya explicación dejaré a cargo del colega Urbano Marín.
En todo caso, deseo hacer notar que, como los anteproyectos deberán ser sometidos a la consideración del Pleno de la Corte Suprema, todavía resultará oportuno que las conclusiones a que se llegue en la presente Convención se eleven también a la misma Corte, a fin de que puedan ser conocidas y, si fuere del caso, también apoyadas por este Tribunal para, dentro de nuestras posibilidades, obtener el fortalecimiento institucional y la modernización que todos los judiciales deseamos.
Les reitero, finalmente, aprovechar esta Convención para formular sugerencias realistas y constructivas, recordando que siempre son más útiles las iniciativas que las simples críticas meramente negativas que nada aportan.
Creo oportuno recordar, en esta oportunidad, algunas palabras que pronuncié hace algún tiempo con motivo de la inauguración de la nueva sede del Instituto de Estudios Judiciales. Manifesté en dicha ocasión que los hombres, en términos generales –y atendiendo a la forma como participan en el transcurrir de la vida- pueden dividirse en tres grandes grupos: los que van en el desfile, los que miran el desfile; y los que ni siquiera saben que hay un desfile, esos que “no están ni ahí”, en el lenguaje de la juventud de estos días.
Decía también que el primer grupo representaba una minoría y, arbitrariamente, la fijaba en un 20%: son personas que hacen que las cosas sucedan. Siempre están transformando las cosas para procurar mejorarlas. Crean y se adelantan a su época.
El segundo grupo, lo determinaba en un 30% de la población. Ellos no van en el desfile, pero lo observan. Habitualmente lo comentan diciendo cosas tales como:
“Que lindo desfile. Como me gustaría ir en él. Pero no estoy preparado. Tengo demasiadas responsabilidades. Estoy viejo”. Y miran como el desfile se aleja.
El tercer grupo abarca el resto de la población, los que no saben que se desarrolla un desfile. Los “que no están ni ahí”, aunque no lo reconocen francamente.
¿A título de qué estas reflexiones?. Pues, simplemente, en que en estas materias todos nosotros debemos participar activamente en el desfile. En este aspecto, es indudable que nadie conoce mejor la judicatura que los que la están viviendo. La oportunidad es propicia para que, en estos momentos, podamos lograr aspiraciones por las que se viene luchando desde hace bastante tiempo. No mañana ni después sino ahora.
Les deseo el mayor de los éxitos en sus labores y propósitos que son, como ya lo he dicho, también los de la Corte Suprema de Justicia.
Muchas gracias